Ramón Perales, gerente de Perales Digital, echa una mirada sobre el panorama inmobiliario a medio plazo. Tras casi dos meses en que las oficinas han permanecido cerradas, la persiana vuelve a subir cada día.
¿Cómo se encuentra la situación inmobiliaria en general?
Partimos de que esta crisis es muy diferente a la del año 2008. Aquella fue una crisis financiera en la que las entidades cortaron el flujo de dinero tanto a empresas como a particulares. Ha costado mucho tiempo que esta situación cambie y por eso hubo un parón económico muy importante y una bajada de precios en ese momento muy alta. Esta crisis sanitaria es diferente, es algo coyuntural que ha pillado a todos por sorpresa.
¿Qué efecto tendrá la crisis del coronavirus en los precios?
Los cambios al alza o a la baja de los precios los desconocemos de momento. Hasta que no se levanten totalmente las restricciones al movimiento y veamos la reacción de la gente, no sabremos exactamente ni qué oferta ni qué demanda vamos a tener a medio plazo, por lo que vaticinar actualmente un porcentaje de subida o bajada de precio es muy arriesgado. Pero pensamos que en Vitoria los precios ni van a bajar mucho ni van a subir mucho. La demanda es sostenida y en los vendedores no hay, en general, una necesidad urgente.
¿Por dónde irán la oferta y la demanda?
Lo lógico es que aumente la oferta debido al aumento de pisos de herencias, pisos por el aumento de separaciones o divorcios, o pisos de gente que tenga dificultades económicas y necesite liquidez, o que tenga que cancelar sus préstamos. Posiblemente arranquemos con una bajada de la demanda ante la incertidumbre y el miedo, y durante un tiempo todo el mundo va a estar a la expectativa.
Lo que sí observamos es que en esta crisis el gobierno está dando ayudas tanto a empresas como a trabajadores para intentar mantener los puestos de trabajo, y que todo el mundo tiene ganas de volver a salir y empezar a funcionar, por lo que quizá a corto plazo haya un parón, pero creemos que a medio y largo plazo las aguas volverán a su cauce. Todo ello reforzado por el interés de las propias entidades financieras en apoyar nuevos proyectos de empresas o compras de viviendas.
También estamos observando en estos primeros días mucho interés y consultas por promociones nuevas que tenemos en las zonas cercanas al Anillo Verde con terrazas y jardines, como Parque del Este, Armentia y la zona de Olárizu. Quizá esta fiebre se pase cuando volvamos a la vida normal, y quien compre sea el que lo tenía claro antes de la pandemia.
«Ahora mismo entraremos en una fase de reconstrucción en la que tanto las empresas como los particulares tenemos que mirar con optimismo e ir superando miedos e incertidumbres, que son el peor enemigo para el desarrollo normal de una sociedad de consumo y de bienestar».
Perales Digital, la casa de las casas
